Crónica de una muerte anunciada (Parte II)
El crimen ya estaba cometido. Todos sabíamos quiénes eran los culpables. La sangre de Santiago Nasar llevaba décadas sobre las páginas, pero algo seguía sin encajar. ¿Cómo fue posible? ¿Quién dejó que ocurriera? ¿Y qué hacemos nosotros, ahora, con esta historia? Así comenzó la segunda y última sesión del club de lectura dedicada a Crónica de una muerte anunciada , de Gabriel García Márquez. Si en la primera parte los asistentes se habían transformado en periodistas e investigadores para analizar el caso, esta vez se enfrentaban a su desenlace: reconstruir los hechos, emitir un juicio, comprender las consecuencias. Iniciamos la sesión con un ejercicio de memoria colectiva: entre todos construimos una línea temporal del día del crimen, marcando los momentos clave en los que se pudo haber evitado. La sensación era clara: nadie apretó el gatillo, pero muchos cargaron el arma. Luego llegó el turno de los debates. Uno de los más intensos fue el dedicado a Ángela Vicario. ¿Víctima o responsab...